También lo podéis encontrar bajo pedido en vuestra
librería habitual. Pero lo más importante: ¿qué vais a encontrar entre sus
páginas?
Todo comienza con Roberto, un publicista que al
volver una noche a su casa encuentra a su querida novia
en la cama con un compañero de trabajo suyo. Seguro que más de uno
nos hemos imaginado esta situación alguna vez, y a mí en concreto me vino a la
mente una imagen: la silueta oscura de una pareja haciendo el amor, ella sobre
él en una danza sensual y decadente.
Os imaginaréis cómo reacciona Roberto ante esa
visión… O no, porque se podría reaccionar de mil maneras distintas. A partir de
esta escena todo en la ordenada vida de Roberto se vuelve patas arriba, y su
familia y sus amigos le darán la mano en la tremenda aventura de reencontrarse a sí mismo. Porque no importa cuántas veces caigas, sino la
forma que tienes de levantarte.
Roberto se reencontrará con Cristina, su amor platónico de la adolescencia, su
leona de piernas de infarto y ojos de diosa, que lo lleva
al límite y le saca lo peor de sí mismo, pero también lo mejor.
Entre momentos de lo más variopinto, besos robados y
saltos en parapente se redescubrirán, se sufrirán y también se
degustarán a placer.
Además en el libro tenemos una trama secundaria de suspense que os mantendrá en alerta
hasta el final, y un grupo de malos malísimos que intentarán hacerle la vida
imposible a alguno de nuestros personajes.
Os dejo la sinopsis y os invito a embarcaros en
esta historia que os puede decir que está escrita con muuucho amor:
SINOPSIS:
Estoy
nadando en esta piscina escondida entre las rocas, con el cuerpo de la sirenita
de fuego al alcance de mis manos, y no puedo hacer otra cosa más que intentar
refrenar las ganas de devorarla. Porque quiero beberme sus suspiros y hacerle
cosas que escandalizarían a mi antiguo yo.
Ahora hay
pocas cosas que me asusten de verdad desde el día en el que volviendo de un
viaje de trabajo me encontré a mi novia, casi mujer, en mi cama con otro
hombre. Y no uno cualquiera, no… Eso me hizo reencontrarme con Cristina y darme
cuenta de lo mucho que me sigue atrayendo, porque ya no es una cría pecosa, sino
una mujer adicta a los deportes extremos y el peligro en todas sus formas, y
que tiene la capacidad de poner patas arriba mi mundo. Y eso es muy grave para
un fanático del control y el orden como yo, ya que mi vida es más caótica que
nunca: viviendo en casa de mi hermana supercocinera con olfato de detective,
con una ex novia llena de curvas que no para de llamarme para que volvamos, y
una antigua pandilla de peculiares amigos que hace todo más divertido.
Por si
eso fuera poco se ha despertado en mí una adicción por las peleas, que me ha
llevado a meterme en líos con cierta banda callejera que amenaza a los que más
quiero.
Y entre
todo esto se alza Cristina, gloriosa sobre un parapente o surcando las olas del
mar. Con ella no hay límites, ni tiempo ni cordura. Solo puedo aspirar a sentir,
sentir a rabiar y con devoción, y esperar a que ella haga lo mismo, mientras mi
corazón late guiado por los golpes de la batería de una canción.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Me encantan vuestros comentarios, poder compartir entre todos este gran universo de la literatura y la vida en general, así que si tenéis unos minutitos podéis dejar vuestro granito de arena por aquí ¡Besos!