lunes, 19 de septiembre de 2011

Proyecto Adictos a la Escritura: La fotografía

Hola a todos!! Dejo mi aportación para el proyecto del mes de septiembre del grupo Adictos a la Escritura. Había que hacer un relato relacionado con una fotografía hecha por nosotros mismos. Yo he empleado tres fotos. Siento mucho la tardanza en la publicación, pero tenía otra cosa preparada, y al no poder reducirla he tenido que hacer una modificación total. Ahí va:

"El asesino del tiempo"


Estaba nerviosa. Y no era un estado que solo yo percibiera, todo mi cuerpo manifestaba un ligero temblor, por lo que agradecí estar sola para que nadie más lo pudiera apreciar. Miré una vez más por la ventana, y entonces lo vi. Nuestro sospechoso salía de su casa con una gabardina negra, y calándose un bombín del mismo color en la cabeza. Desde donde yo estaba no podía distinguir bien sus rasgos, pero sabía que era él, “El asesino del tiempo”. Se dedicaba a cometer crímenes en el presente, y creíamos que viajaba al pasado para construirse una coartada perfecta, ya que en el escenario del crimen jamás había nada que lo inculpara. Tan solo un viejo reloj de bolsillo sobre el pecho de la mujer asesinada. George y yo le seguíamos la pista desde hacía tiempo, pero nunca habíamos encontrado nada claro, hasta que visitamos a una conocida bruja de Candem Town. A cambio de favores policiales en lo que le quedaba de vida, aquella oscura y siniestra mujer, que se cubría con un turbante morado su cuerpo y lucía grandes aros dorados en las orejas, nos reveló el secreto para seguirlo a través del tiempo:
“Solo en la línea del Meridiano 0 podréis transportaros al pasado o al futuro sin ser hechiceros. La persona a la que buscáis tiene poderes, pero se acentúan en ese lugar, por eso él siempre partirá de allí. Además seguramente viaje en luna llena”.
Tras esta revelación, no le preguntamos a la bruja porqué sabía todo eso, simplemente alquilamos un piso en frente de donde vivía el criminal, y esperamos su siguiente movimiento. Aquel día se había cometido otro asesinato, y no estábamos dispuestos a que aquel asesino continuara en las calles. Miré el calendario y comprobé que la luna estaría llena al caer la noche, como nos había asegurado aquella mujer. Un escalofrío recorrió mi columna mientras mandaba un mensaje por el móvil a George: “El objetivo sale del nido. Nos encontramos por el camino”.
Acto seguido me apresuré a bajar las escaleras de dos en dos y corrí hacia el portal. A lo lejos podía ver la silueta oscura del sospechoso, que caminaba a paso ligero. Lo seguí a una distancia prudencial hasta que llegamos a la boca del metro. En ese punto me acerqué un poco más, ya que había una gran masa de gente colapsando las escaleras y los pasillos. Cuando llegamos a la vía del metro, me senté en un banco dedicándome a mirar los carteles publicitarios que inundaban las paredes, y vigilando de reojo al criminal. Concentrada como estaba en mi labor, no detecté ningún movimiento a mi   lado hasta que una figura corpulenta y alta tomó asiento junto a mí. Algo sobresaltada me volví y respiré aliviada al ver el rostro anguloso de George a mi lado. Sus ojos color miel me miraban con un brillo excitado. Adoraba las persecuciones, y no podía evitar que se le notara. Desde luego a mi no me lo podría esconder, llevábamos trabajando dos años en Scotland Yard, y siempre habíamos sido compañeros. Desde el inicio me había encantado trabajar con él, acostumbrándome a su manera impulsiva de ver las cosas. A lo que no me acostumbraba era al cosquilleo que me producía en el estómago su simple presencia. Alto, rubio, con una sonrisa sincera y magnífica y un trato muy cercano, me llevaba de cabeza día tras día. Me obligué a volver al presente cuando el ruido del metro parándose ante nosotros, hizo que George se levantara rápido, cogiéndome del brazo y tirando de mí. Cuando llegamos a la parada que desembocaba en una estación, seguimos sin perder de vista a nuestro objetivo, que se montó con premura en un autobús. Imitándolo, subimos también, y al poco llegamos a Greenwich. A paso rápido, llegamos a la construcción que albergaba la línea representativa del meridiano 0. Atravesamos la reja de hierro con sigilo, a aquella hora ya no quedaba casi nadie allí. El sospechoso miró a su alrededor, nosotros nos escondimos tras una pared para que no detectara nuestra presencia. Vimos como se posicionaba sobre la línea del meridiano, a la vez que cerraba los ojos y alzaba las manos al cielo. Movió los labios sin producir sonido alguno, y al instante, una cortina de viento se arremolinó en torno a él, y como si de un torbellino se tratara, lo absorbió hasta dejar vacío el espacio que antes había ocupado el hombre.
George y yo nos apresuramos hasta el lugar en el que había desaparecido, juntando nuestros pies sobre la línea del meridiano. Sin saber como proceder, recordé que la bruja de Candem nos había indicado que el viaje en el tiempo creaba una especie de grieta que tardaba unos minutos en cerrarse. Así que cogí las manos de George, intentando ignorar el dichoso cosquilleo en el estómago, y esperamos. A los pocos segundos sentimos como si algo tirara de nosotros, todo a nuestro alrededor se difuminó. El corazón se me aceleró visiblemente, pero la mano de George me servía de apoyo. El torbellino que nos transportaba nos lanzó fuera de su órbita, y chocamos contra un duro suelo de madera. Estábamos en el interior de una vivienda. No había ninguna luz encendida, pero el espacio me era extrañamente familiar.
-          ¿Estás bien, preciosa?- preguntó George mientras se incorporaba-. Esto ha sido bastante extraño.
-          Sí, gracias- le susurré agarrando la mano que me ofrecía para incorporarme- ¿No te suena esta casa?
-          Es la casa de la víctima asesinada esta mañana- replicó sombrío George.
Nos adentramos en la vivienda con facilidad, ya que sabíamos la disposición de las cosas. Estábamos en la cocina, el crimen había sido cometido en el salón, que estaba al salir a la derecha. Nos aproximamos a aquella sala y nos quedamos junto al quicio de la puerta. Me asomé ligeramente y pude ver con claridad como nuestro sospechoso dejaba una especie de fibras sobre la mesa del salón. También dejó caer unas gotas de un frasco con un líquido rojizo. “Sangre” pensé. Hice fotos de todo ello con la microcámara de la que disponíamos. Después el asesino salió de la casa, cogiendo un taxi en la puerta. Nosotros cogimos otro y fuimos tras él. Ya teníamos pruebas para inculparlo, pero queríamos saber la coartada que utilizaría. Se bajó frente a un bar y entró en el mismo. Lo perseguimos viendo como se sentaba al lado de una chica e intentaba seducirla. Así pasaron un par de horas, y comprendimos que el crimen ya había tenido lugar. El criminal se levantó, y entró al cuarto de baño. Lo seguimos sin perder un instante y allí vimos como realizaba el mismo ritual que en Greenwich. Así que sin dudarlo un momento, cuando el remolino lo empezó a envolver saltamos hacia él, dejando que la corriente de aire nos envolviera a los tres. Aterrizamos en Greenwich y sin dudarlo un momento le pusimos las esposas. Teníamos pruebas y con suerte conseguiríamos encerrarlo entre rejas. George me miró con una amplia sonrisa que anunciaba que teníamos que celebrarlo. Le devolví la sonrisa deseando que por fin llegara la celebración que yo quería, y nos encaminamos a la comisaría.  Por fin lo habíamos logrado, ¿conseguiría yo también que el chico malo de ojos dorados se fijara en mi? Todo un reto, pero eso siempre me había encantado.

¡Gracias por leerme!

13 comentarios:

  1. Sí, no podía faltar un George buenorro en ésta historia, jaja.
    Excelente como siempre, Hada. Siempre me sorprendes, mira que sacar una historia de ciencia ficción de la manga... ¡genial!
    Te lo dije en facebook y lo repito: espero que nos compartas también el otro relato, el extenso ;-)

    Besos!!

    ResponderEliminar
  2. Por fin empiezo a leerte y ha sido una buena elección comenzar por el proyecto de Adictos, al igual que Maga espero que publiques tambien el relato extenso.
    Las fotos estan geniales

    ResponderEliminar
  3. me encantan esta clase de relatos, es muy original!

    ResponderEliminar
  4. Tu idea es muy original: un asesino que borra pruebas viajando al pasado. Te habría dado para un relato más largo, pero así está muy bien. La verdad es que me encanta la ciencia ficción. ¡Felicidades por tu relato!

    ¡Saludos!:)

    ResponderEliminar
  5. estupendo relato!!me encantó, espero leer el extenso también

    ResponderEliminar
  6. Fantástico! una excelente idea y bastante original. Adore el relato
    Besos :)

    ResponderEliminar
  7. Muy bueno Hada!!! Me ha encantado!!

    ResponderEliminar
  8. Ciencia ficción de lujooo:D

    Levo varios días viendo pelis de este género, y me emocionaste, mi Maga:D

    Me ha encantado, ¡¡bravo!!

    Un besoooo

    ResponderEliminar
  9. Guaoooo me encantó, que buen relato, me dejas con ganas de querer más... felicidades

    ResponderEliminar
  10. Hola. Me encantó tu relato!! Saludos :)

    ResponderEliminar
  11. Hola! ya esta cap#10 de mi historia,espero q te gusta,si lo lees..Buen finde....abrazos y mordiskos

    ResponderEliminar
  12. Que original, todo un misterio, me encantó!!

    Felicitaciones!!

    ResponderEliminar
  13. Enhorabuena, Hada, una buena historia que me ha sabido a poco. Por cierto, me parece que no te apareció el "0" junto a meridiano, sino que fue una "o". Hasta luego,

    Selin

    ResponderEliminar

Me encantan vuestros comentarios, poder compartir entre todos este gran universo de la literatura y la vida en general, así que si tenéis unos minutitos podéis dejar vuestro granito de arena por aquí ¡Besos!